martes, 27 de febrero de 2018

Sordos.

¡Sordos!
ustedes sordos jamás
han oído el agua
que estancada reclama,
¡Sordos!
ustedes sordos no
habéis oído nunca
lo que el silencio grita,
¡Sordos!
ustedes sordos imposible
que hayan oído la noche
bramar su pena oscura,
¡Sordos!
ustedes sordos ni una 
idea tienen del canto
meloso de los colores,
¡Sordos!
ustedes sordos de seguro 
creen que les hablo
de problemas auditivos,
¡Sordos!

domingo, 25 de febrero de 2018

Poema 25.

Te abrazo el alma
y te desvaneces 
como el humo
que se desliza
por el aire,
como siendo devorado.

Te busco en mi paz
y en mis apocalipsis 
diarios, pero no,
tu te desvaneces 
como la espuma 
en su punto más
alto y abundante.

He de rogarte;
a gritos, a llantos,
a patadas, a cansancio,
a dolor, a carencia,
he de rogarte ahogado
que vuelvas,
pero te desvaneces 
como hace el Fénix.

¿Dónde estás?
acaso no recuerdas
que de niño me dijiste;
Hijo, yo siempre voy
a estar contigo.

lunes, 19 de febrero de 2018

A veces.

A veces siento caer tu respiración 
cual rocío sobre toda mi piel.
Sobre mi desarmado cuerpo
bajo la presión de tus deseos 
descontrolados y exquisitos,
tu cuerpo breve, tu cuerpo frágil.

A veces alcanzo a morder
tu perfume meloso, ese aroma
que me recuerda la vida dulce,
con el que olvido la sal
de las lágrimas,
tu perfume que me hace 
agua la boca, que me abre el apetito de ti.

A veces escucho tu boca
jugosa que en mi piel
busca la manifestación de tu lengua,
que encuentra y se llena 
de mis ganas hechas liquido.

A veces, ¡dios tuyo!, siento tus manos,
tus manos en su exploración
infinita hasta donde puedan
con firmeza agarrar 
la expresión viva de mi cuerpo.

A veces siento tu peso
precisamente donde el peso
es la presión magnífica 
que me mata, me tortura y me mata.

sábado, 17 de febrero de 2018

Corazón de palta.

Yo me voy de ti
pero no así tu de mi,
decido por ambos
pero sólo yo solo
me quedo aquí.
Es que tu no sabes,
es que tu no entiendes,
no todo son jardines
y primaveras de películas,
no todo son aves libres,
hay aves enjauladas,
aves con alas que no vuelan.

Me despido con besos y abrazos,
besos y abrazos dolidos,
amontonados en el oscuro
silencio incómodo
que siempre dejo tu indiferencia.
Llevo puesta la armadura
que deja un rechazo categórico,
voy bien triste y bien serio,
voy y no vuelvo, no vuelvo.

Yo me voy de ti, me despido.

Tienes el corazón de palta,
la única palta que me quedé sin morder,
tienes el humor dulce de la miel,
yo no tuve jamás abejas para cosechar,
tienes en los labios el beso mío,
ese que nunca voy a conocer.



domingo, 11 de febrero de 2018

Desamor

Mi amor desafortunado
sujeto a posibles cambios,
mi amor ambiguo e
inestable a cada segundo
de existencia,
mi amor trágico, exagerado,
categórico abandono,
indudable desprecio,
mi amor maldito.

Mi amor rebelde con causa,
revelado justo cuando
feliz oculto florecía,
mi amor insensato,
descuidado e irónico,
mi amor triste, también,
y por qué no, mi amor
malherido, maltratado,
a medio morir sufriendo.

Mi amor esporádico,
fugaz cual niñez
desperdiciada
sometida al sistema,
mi amor apolitico,
amor ausente,
amor carente,
amor falto,
amor a llantos,
amor maldito,
maldito, maldito.

lunes, 5 de febrero de 2018

Semi Chile

Pareces cansado,
como aislado,
como aún exiliado,
alejado no solo
de la corona,
sino también 
de tu libertad.

Quizá te acostumbraste;
al yugo, al maltrato,
a la sangre sobre el trigo,
a las balas que en tu pecho
se sembraron.
Quizá extrañas ser colonia,
no por lo bien que viviste,
sino por el hambre de libertad,
de firmar la libertad.

Allí estas mi Chile,
semi legislado, semi constitucional,
así medio independiente,
ultrajado, vejado, maltratado,
a medio morir... muerto.

Hoy desfilamos por tus venas,
alzamos el rostro al dictador.

¿qué celebramos?

¿La sed por venderte en la junta
de aquellos años, o todo esto
a medias que nunca te ha salvado?

Limerencia.

Me perdí en el arrebol de tus ojos
dejándome llevar por tu efervescente sonrisa,
abracé con mis oídos cuanto emanó de tu boca,
até con mi mente mis brazos, por respeto,
para contener mis deseos casi obscuros 
de abrazarte y tenerte tan cerca de mi calidez,
porque nuestro encuentro, fue una serendipia.

Aún percibo en mis recuerdos tu etéreo rostro,
lo pienso, y sin duda se torna inefable, aunque diáfano, 
tan breve encuentro, mi corazón golpeó mi pecho
con tal fervor, que desde ese día tu imagen me estremece.

Cuando llegas a mi mente olvido las cacofonías del día
y sólo oigo el melifluo sonido de tu voz, 
acariciando mis oídos excitados con tus palabras;
tu mezcla de vocales y consonantes son elixir,
y déjame ser honesto querida...
adoraría estar a un segundo de tu boca pintada de 
iridiscencia de invierno.

Asesinas tiernamente mis sueños, mis recuerdos,
te atraviesas fugazmente por mis pasillos
construidos con dolor y olvido,
dejando tu estela de alegría y primavera indómita.

A veces te deseo tanto, imagino tus manos
revoltosas por mi cuerpo, tu boca dulce,
a veces tal vez te amo como la última gota de agua 
que busca el desaparecido en Atacama,
como el esquizofrénico persigue sus ideas,
te acosaría con versos, mi guitarra, y un Merlot.